El volcán Calbuco, que se levanta en el sur chileno, ya emana lava desde un cráter lateral, luego de que entrará en erupción desde las 18 horas de este miércoles. En tanto, San Carlos de Bariloche y toda esa región cordillerana del sur argentino vive las consecuencias de la caída de cenizas. Las clases fueron suspendidas y el aeropuerto barilochense fue cerrado a toda operación aérea
Un equipo de científicos chilenos ha llegado a los faldeos del macizo, a 3 ó 4 kilómetros de distancia, pasando antes por el punto de seguridad que se ubica en la localidad de Correntoso, luego por la zona del lago Chapo y por último por un camino vecinal.
Se observa material incandescente en la parte superior del cono, que contrasta con la oscuridad de la noche. En esa zona, por el momento no hay temblores ni caída de piedras.
Al punto de seguridad en Correntoso, llegaron los evacuados desde las zonas de Río Blanco y lago Chapo. Además, el paso internacional de Peulla, se encuentra cerrado y las personas de esta zona fueron evacuadas hacia la Argentina.
Una vez más, la erupción de un volcán en Chile enciende las alarmas en las localidades andinas de Río Negro, Neuquén y Chubut. La actividad que se registró en el Calbuco, en la región de Los Lagos, preocupa sobre todo a los habitantes de Bariloche y sus alrededores, distante a unos 100 kilómetros.
En Chile, la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior y Seguridad Pública (Onemi) decretó el alerta roja de la zona y ordenó evacuar a 1.500 personas. En tanto, las autoridades de Bariloche preparan medidas de contingencia.
La intendenta barilochense, María Eugenia Martini, convocó al Comité de Emergencia de la ciudad y, tras el encuentro, ordenó la suspensión de las clases y anunció un operativo "especial" de seguridad. Además, se resolvió cerrar el aeropuerto local. El transporte urbano funcionará con normalidad.
"Queremos transmitirle tranquilidad a la comunidad. Tenemos la experiencia de hace cuatro años”, dijo Martini, según recogió la Agencia de Noticias Bariloche (ANB), y pidió a la comunidad que “tome con tranquilidad y disposición” la situación.
“Debemos aprender a convivir con los volcanes y las erupciones”, añadió. Cerca de las 23, la ANB confirmó la caída de cenizas sobre la ciudad.
La funcionaria se comunicó además con la ministra de Seguridad de la Nación, María Cecilia Rodríguez. Autoridades nacionales y provinciales viajarán a la ciudad para colaborar.
“La explosión del volcán era algo que no se podía prever. Se comunicó conmigo el Ministro de Seguridad de Chile, y me explicó que pese a la aparatología que poseen en ese país, no se pudo detectar ni prever”, dijo Martini.
El organismo emitió una serie de recomendaciones para el caso: en caso de una lluvia de cenizas, pidió a los vecinos permanecer en sus casas y prever reserva de agua; utilizar barbijo número 95 o mayor y antiparras para salir; mantener las mascotas dentro de casa; mojar la ceniza en el exterior de su hogar para evitar que vuele; mantener limpios desagües y canaletas; evitar que la cenizas se acumule más de 10 centímetros, entre otros.
Según la agencia Noticias Argentinas, había largas colas en estaciones de servicios y almacenes de vecinos que buscaban abastecerse por eventuales inconvenientes.
El avance de la densa nube de cenizas que arrojó el volcán podía observarse esta tarde desde varios puntos de la zona andina argentina.
El "hongo" que produce la emanación de material piro plástico fue observado en la costa del Lago Nahuel Huapi, pero también desde otras localidades más lejanas, como Junín de los Andes.
La inesperada erupción del Calbuco se dio en paralelo con la actividad que registra desde el 3 de marzo otro volcán chileno, el Villarrica, que mostró destellos de lava y expulsión de material incandescente, cenizas y gases hasta una altura de unos seis kilómetros.
Bariloche fue una de las zonas más afectadas en 2011 por la actividad del complejo volcánico Puyehue-Cordón Caulle, cuando un manto de sedimento cubrió durante semanas el área. (Jackemate.com)