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La interna en el socialismo santafesino, y que indudablemente repercute en el Frente Progresista Cívico y Social, está más al rojo que nunca y ya muchos predicen una nueva escisión política como la ocurrida a mediados de los años 90, cuando Héctor Cavallero decidió retirarse del partido de la rosa tras perder en las internas con un Hermes Binner que comenzaba a asomarse como dirigente rosarino. En esta ocasión, fue el mismo gobernador de la provincia quien con sus expresiones recalentó la cuestión y, sin muchas vueltas, respondió a sus aliados y a la vez rivales internos en las próximas elecciones del 22 de mayo.

Binner, según publican distintos portales periodísticos regionales, aseguró que el radical Mario Barletta, precandidato a gobernador por el radicalismo “no es coherente” en sus reclamos y que Rubén Giustiniani, otro precandidato del FPCyS a sucederlo como jefe de la ‘Casa Gris’ dijo que debilita al Partido Socialista con su accionar. Además, el mandatario socialista reconoció que desconfía cuando ambos lo impulsan en público como candidato presidencial: “Me quieren sacar de encima”.

Para el rafaelino ex intendente rosarino, el pedido de Barletta de reunir a los cuatro candidatos a la gobernación del Frente Progresista (además del radical y Giustiniani, el actual ministro Antonio Bonfatti y Luis ‘Changui’ Cáceres) corresponde al “mundo del revés”.

Y agregó; “Se puede hacer. Pero, ¿ahora quieren? Tendría que haberse hablado primero pero no fue así,  uno me comunicó que iba a ser candidato y se largó por su cuenta y otro no me dijo nada. Tomaron caminos diferentes”.

Sobre los dichos de Agustín Rossi, quien señaló que la interna del justicialismo era más “civilizada” que la de socialistas y radicales, Binner no se le agarró con el precandidato del kirchnerismo, y siguió concentrado en sus rivales de turno.

“El Frente Progresista también es civilizado. No estamos con agresiones y no creo que sea diferente a otro partido político donde se muestra una gran debilidad institucional”, dijo y enseguida se concentró en la figura de Giustiniani, señalando: “Eso pasa en Santa Fe con nuestro partido, donde el presidente de forma inconsulta y sin ninguna reunión partidaria se lanzó como candidato. Eso es parte de esa debilidad que vivimos”.

Binner no se quedó a tras y fue por más, y en diálogo con periodistas de la ciudad capital -entre ellos Ivana Fux, corresponsal de Radio 2- acusó a Giustiniani de paralizar el PS.

Un socialismo parado a nivel nacional

“Si usted quiere hablar de democracia, eso no es largarse por su cuenta, sino hablarlo. El Partido Socialista a nivel nacional está absolutamente parado, supeditado a lo que pase en Santa Fe y no lo comparto a eso, pero es parte de la democracia en que vivimos”, señaló.

También para Barletta hubo flechazos, tras las acusaciones del radicalismo con respecto al uso de fondos públicos de la provincia para la campaña de Antonio Bonfatti, ministro de Gobierno y de la Reforma de Estado y precandidato a gobernador por la lista oficialista del FPCyS.

“Debería seguir (con la denuncia), ir a la Justicia y ser coherente en la vida. No debería quedarse en eso. Y si no lo hace, no hay que decir nada. Porque si yo tengo una sospecha de Ricardo Atala (dijo como ejemplo y en relación a su secretario) no digo nada hasta que lo confirme”, aseveró Binner.

“Todos me quieren sacar de encima”, afirmó, finalmente, Binner cuando se le preguntó si le creía a Barletta y Giustiniani cuando hablan de usted y dicen que lo quieren como candidato a la Presidencia. (Jackemate.com)

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