El presidente norteamericano Donald Trump, utilizando la clásica maniobra política de visitar a víctimas de una masacre, resultante de la impericia del FBI, se hizo presente en el hospital de Florida Broward Health North Hospital, localizado en Pompano Beach, en el que se hallan internadas las víctimas del ataque en la secundaria Marjory Stoneman Douglas, en el murieron 17 personas a manos de Nikolas Cruz
Posteriormente, mantuvo un diálogo con los policías que asistieron a los atacados por Cruz, el tirador que en sede judicial admitió su responsabilidad para evitar ingresar al pasillo de la muerte para ser ejecutado.
“Es triste que algo pueda pasar”, señaló Trump en una pobre y escueta declaración como premio a los médicos y policías que gracias a su respuesta eficaz atendieron la resultante del ataque de un individuo de 19 años, con problemas psicológicos, ex alumno de la institución educativa referida.
Trump, al entrevistarse con el policía Mike Leonard, del Coconut Creek que arrestó a Cruz, al detectarlo caminando en la vía pública y sin el arma utilizada en el homicidio múltiple –abandonada en el lugar del ataque para escapar mezclado entre los estudiantes-, se hallaba acompañado del gobernador de Florida, Rick Scott y la fiscal de Estado Pam Biondi, según lo informó la agencia EFE.
Una Norteamérica violenta
El titular del Ejecutivo norteamericano evitó, una vez más, hacer alguna referencia a la falta de controles en lo referido a la venta de armas.
Es más que obvio para algunos analistas, a esta altura de los múltiples acontecimientos violentos, que la sociedad yanqui es inusualmente violenta.
Para colmo, sus divisiones raciales desgastaron a la sociedad en su conjunto y, además, sus ciudadanos carecen de precauciones básicas para prevenir el tipo de ataques como el sucedido.
La sociedad norteamericana, vale puntualizarlo, posee el 42 % de armas del mundo -300 millones-, esto es 1 por cada hombre, mujer o niño.
Estudios criminales realizados por especialistas,- liderados por Adam Lankford de la Universidad de Alabama, en 2015-, realizados desde 1966 a 2012, indican que “el 31 por ciento de los atacantes de tiroteos a nivel mundial era estadounidense”.
EE.UU: El país con más habitantes con problemas mentales
El mismo Lankford asegura que EE.UU posee más habitantes con problemas mentales que otros países.
Sólo Yemen tiene una tasa criminal más alta en lo concerniente a tiroteos masivos entre países con más de 10 millones de habitantes y ese país posee la segunda posesión más alta de armas en todo el orbe.
Sin embargo, en el 2015 se estimó que el 4 por ciento de muertes por armas de fuego puede ser atribuido a casos derivados de crisis de salud mental.
Entre los países europeos hay poca relación entre inmigración u otras medidas de diversidad y las tasas de homicidios con armas de fuego o tiroteos masivos.
En el 2009 el índice de homicidios con armas de fuego era del 33 por ciento, superando por mucho el promedio entre los países desarrollados.
Otros dos analistas, Franklin Zimring y Gordon Hawkins, de la Universidad de California, radicados en Berkeley, en 1999 comprobaron que Norteamérica no es más propenso al crimen que otros países desarrollados. Hallaron sí que es un país más letal.
En ese sentido, vale apuntar que los habitantes de Nueva York tienen, según ese estudio, más posibilidades de morir que un inglés (+ 54 por ciento).
Trump no dijo en sus declaraciones a la prensa estadounidense que el país que conduce tiene uno de los controles más débiles sobre las armas disponibles para comprarlas.
Su índice de homicidios con armas en el 2004 fue del 7,7 por ciento por cada 1.000 habitantes.
En la otra punta de los controles se encuentra Suiza. Las leyes suizas sobre armas para la población son más estrictas en requisitos, tanto para comprar como para vender y sobre las armas permitidas en un hogar.
Hay que destacar que Australia, tras un tiroteo en 1996, aplicó leyes más estrictas, mientras que Estados Unidos padeció el ataque de 90 tiradores en masa desde 1966 a 2012.
Ningún otro país tiene más de 46 millones de armas o 18 tiradores masivos, según Adam Laukford.
(*) Licenciado en Periodismo – rimar9900@hotmail.com