La Dirección Provincial de Accidentología y Emergencias Sanitarias (Dipaes), organismo dependiente del Ministerio de Salud, participó en Zavalla de un simulacro de explosión seguida de incendio y derrumbe de un quincho, situación que originó la dramatización de víctimas múltiples
Este simulacro lo hizo junto a la Subsecretaría de Protección Civil y organizaciones civiles relacionadas con la emergencia sanitaria, y se practicó el pasado sábado en el camping de la Asociación de Talleres de Reparaciones de Automotores y Afines de Rosario (ATRAR), a la vera de la ruta nacional 33, a la altura de Zavalla, distante unos 22 kilómetros al sudoeste de aquí.
Asistieron al ejercicio 150 personas, las que previamente tomaron parte de la capacitación teórico práctica para asistencia en emergencias y desastre de magnitud.
Además se involucraron 100 vecinos de la comunidad que oficiaron de víctimas, quienes simularon cuadros que revestían distinta gravedad y compromiso, mientras que el resto de los asistentes se repartieron por el predio convirtiéndose en respondientes ocasionales y voluntarios de la emergencia.
Las instituciones participantes fueron la Dipaes, el Sies 107 de Rosario, Pérez, Pueblo Esther; Protección Civil, Bomberos voluntarios de Pérez, Rosario y Brigada de la Fábrica Militar de Fray Luis Beltrán; Cruz Roja Rosario, Agrupación Scouts A.S. 797 “Esteban Laureano Maradona”; Escuela de Enfermería y de Medicina de la UNR, Instituto de Paramédicos de Rosario; Radioaficionados rosarinos expertos en comunicación de la emergencia, ONG “Rosario Solidaria”, UCV de Corral de Bustos, Córdoba, entre otras.
La propuesta consistió en recrear una explosión, incendio y derrumbe de un quincho donde se desarrollaba una fiesta de la que estaban reunidas más de un centenar de personas.
Tras producirse una fuerte explosión, se observaron en el interior y en las adyacencias del siniestro personas atrapadas intentando escapar de las llamas.
De inmediato y ante el cuadro de situación, la provincia respondió movilizando equipos humanos y materiales. Estuvieron disponibles móviles y equipos de rescate de Protección Civil Provincial, 4 ambulancias del Sies 107 provenientes de Pérez, Pueblo Esther y 2 de Rosario, mientras que los recursos humanos, 15 personas entre médicos, enfermeros y choferes, todos coordinados por el jefe del Operativo Sanitario de la Región Rosario, Juan M. Gálvez.
Respecto del entrenamiento, el director provincial de la Dipaes, Jorge Stettler, explicó que lo que se hizo en Zavalla que “fue poner en práctica una vez más los procedimientos habituales para los casos de contingencia ante explosión y derrumbe con víctimas múltiples. Estamos satisfechos porque los organismos de asistencia respondieron a tiempo y se organizaron para brindar una respuesta que resultó sincronizada”.
Y agregó: “Todo ejercicio sirve para perfeccionar destrezas y termina por otorgar lecciones, dado que nos permite ajustar aspectos logísticos y de coordinación entre los equipos de profesionales”.
El panorama recreado en el simulacro de Zavalla tras la explosión, incendio y posterior derrumbe arrojó más de 100 víctimas, entre ellas unas 60 con heridas graves, 20 heridas diversas y otras 20 fuertemente sensibilizadas por lo sucedido.
A pocos minutos de advertidos sobre la emergencia comenzaron a ingresar al camping las unidades de bomberos, ambulancias y de Protección Civil que rápidamente cercaron con una banda plástica de seguridad la zona de la explosión.
Solo se permitió ingresar al sitio de impacto a los equipos de bomberos y de rescate, quienes decidieron en primera instancia asegurar la estructura que quedaba en pie de la construcción.
Una vez lograda la contención del fuego se realizó la clasificación de las víctimas, situación que se concretó con la colocación de pulseras de colores que identificaba la gravedad del cuadro que padecía cada afectado: rojo: estado crítico; amarillo: paciente delicado; verde: lesión leve que no requería de tratamiento inmediato; negro: persona muerta o de muerte inminente.
Simultáneamente, el comando de operaciones conformado, mantuvo comunicación directa con autoridades del gobierno provincial para informar sobre las acciones que se tomaban en el operativo.
A poca distancia del sitio de la explosión, el cuerpo de sanitaristas organizó espacios de atención inicial a través de la colocación de telas de colores rojo, verde y amarillo que se convertiría luego en centro de derivación.
El sanitarista del Sies, Gálvez, relató que “este sitio es creado para que los rescatistas transitoriamente depositen a las víctimas según el cuadro de gravedad que los afecta. Luego de ser identificados debidamente y una vez concluida la asistencia médica inicial, cada víctima es derivada al hospital adecuado para resolver la emergencia”.
Las derivaciones sanitarias de los casos más graves se efectuaron a los hospitales provinciales del Centenario de Rosario y el Hospital Escuela “Eva Perón” en Granadero Baigorria. En tanto los menos graves fueron trasladados a los centros de salud de la región.
El simulacro permitió medir la manera en que se activaron los sistemas de emergencia a través los teléfonos 107, 100, 101, y 911, haciendo foco en el rol que debe ocupar la comunidad responsable. Además sirvió para examinar la respuesta que brindan los organismos que integran la cadena de emergencia: policías, bomberos y trabajadores del Sies, hecho que resultó positivo dado el excelente desempeño durante la actuación en la emergencia.
Sobre esta experiencia, Stettler señaló que “cada simulacro es una exigencia sobre la capacidad de respuesta y el deber que nos ocupa. Además de coordinar correctamente las acciones sanitarias es concientizar a los ciudadanos sobre la importancia de otorgar prioridad a una cultura que sea más preventiva, observando con atención la seguridad del lugar donde uno se encuentra ocasionalmente, sea en un parque, un camping, o en la calle”.
En ese sentido, ejemplificó que “cualquier escenario puede convertirse en sitio de emergencia, por lo que todos debemos comprometernos en enfocar mejores medidas de educación, fundamentos en los que basamos la propuesta educativa del Programa Provincial de Formación de Voluntarios en la Emergencia Sanitaria (VES)”.
Por su parte el comité de especialistas que integraron el equipo de veedores del operativo felicitó a sus organizadores, destacando el modo en que interactuaron los diferentes recursos humanos de las instituciones que cumplieron con la cobertura. (Jackemate.com)