Decenas de somalíes que buscaban su libertad y un mejor lugar para vivir fallecieron frente a las costas italianas de Lampedusa cuando intentaron alcanzar el suelo europeo desde el continente africano. Alrededor de un centenar de cadáveres fueron recuperados de las aguas del Mediterráneo, aunque se teme que la cifra pueda aumentar
La embarcación había partido de Libia, en el norte del África, con unas 500 personas a bordo de una improvisada barcaza, en su mayoría de nacionalidad somalí. Unos 150 inmigrantes han sido rescatados con vida, según informa la agencia internacional de noticias ‘Euronews’.
La clase política italiana interrumpió su agenda del día y la ministra de Integración, de origen congoleño, Cécile Kyenge, condolida por lo ocurrido anunciado medidas en torno al episodio, uno más de los muchos que se contabilizaron en los últimos años.
“Tenemos que empezar por todo lo que está sucediendo estos días para poder cambiar las leyes que deben dar respuesta a las necesidades de un suceso de este tipo. Está claro que tenemos que dar respuestas a todas las personas afectadas por el fenómeno migratorio”, aseguró la ministra italiana.
¿Una Europa distraída de su trágico pasado reciente?
La Unión Europea es consciente que ningún país puede resolver sólo un problema de este tipo y considera necesario adoptar nuevas políticas a nivel europeo.
El Papa Francisco coincide en la necesidad de aunar esfuerzos: “Es una vergüenza. Tenemos que trabajar unidos para que tragedias como ésta no vuelvan a ocurrir. Sólo la colaboración de todos puede ayudar a prevenirlas”, afirmó el Sumo Pontífice tras conocer la infausta noticia.
Según los supervivientes, la barcaza en la que viajaban volcó, tras declararse un incendio en la misma. Éste se desató después de que los llamados ‘sin papeles’ hicieran fuego para ser localizados y rescatados tras llevar horas a la deriva en alta mar.
Este nuevo episodio es el segundo naufragio que se produce esta semana en el sur de Italia. El lunes pasado otros 13 inmigrantes que buscaban libertad, trabajo y comida murieron frente a la costa de Sicilia. (Jackemate.com)