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Por Ricardo Marconi (*)

Santiago Peña, perteneciente al conservador Partido Colorado, asumió la presidencia de Paraguay y su primera decisión geopolítica  fue convocar a optimizar el Mercosur, ya que brega por  su ampliación comercial y su modernización, por lo que se estima que trabajará por la mayor integración  de su país con Argentina, Brasil y Uruguay. Peña, ex ministro de Economía paraguayo y ex funcionario del FMI, de 44 años, se ha convertido en el titular del Ejecutivo más joven de la historia paraguaya.

El Mercosur no posee acuerdos de libre comercio y viene perdiendo  volumen regional, razón por la cual Peña  seguramente buscará bajar tensiones  en la región para optimizar el acceso al agua, la seguridad  alimentaria y la eficiencia energética.

Ha dejado trascender  que buscará que Paraguay sea “el centro  de la integración sudamericana” y que  instruirá a las dependencias que dependen del Ejecutivo  para que “luchen contra las mafias del narcotráfico”.

El asumido presidente pretende que la política deje de ser una “tentación para el crimen organizado”, por lo que buscará  obtener acuerdos horizontales, no sólo con respecto al Mercosur, sino también entre este último organismo y la Unión Europea.

El nuevo presidente expresó que “Paraguay debe generar 500.000 nuevos empleos” y subrayó que su país “no puede ser indiferente  ante la agresión bélica  que sufre el pueblo  ucraniano, una terrible consecuencia que sufre el desarrollo humano con la guerra”, llamando así a que las partes terminen con la misma.

Relaciones de Argentina y el Mercosur

La relación de Argentina y el Mercosur  se inició en la década del 90 y hay que agregar que había diferencias ene l interior del bloque. En el 2022 fue suspendido Venezuela  y Bolivia inició  su pleno proceso de admisión.

La función  primordial ha sido y es propiciar la generación de oportunidades comerciales a nivel internacional y su asociatividad  con Europa para obtener acuerdos de libre comercio entre las partes. Vale señalar que hay miembros asociados.

Para ordenar cronológicamente los acuerdos alcanzados, cabe mencionar:

  • El Tratado de Asunción y el Protocolo de Ouro Preto (1994).
  • La Declaración del Mercosur y el Protocolo de Ushuaia (1998)
  • El Protocolo de Olivos (2005)
  • El Protocolo de Adhesión de Venezuela (2006) y el
  • Protocolo de Adhesión de Bolivia (2012)

Además se trabajó  en un programa de integración económica, lográndose acuerdos por sectores para crear empresas con el objetivo puesto  en las destinadas a la compra y venta de alimentos y aviones.

Además, se buscó articular la creación de una oficina entre Brasil y Argentina para el manejo pacífico de materiales nucleares y para que el Mercosur sea una Zona de Paz y Recuperación de la Democracia en el Cono Sur.

Tanto nuestro país como Brasil mantuvieron reuniones   entre sí para lograr el manejo  económico del carbón, el acero y la energía nuclear.

En 1988, el Mercosur sirvió para lograr un Tratado de Integración, Cooperación y Desarrollo  a los fines de obtener, de manera gradual  y escalonada, un programa de equilibrio, de asimetría y políticas de armonización aduanera.

Y en 1991 se firmó el denominado Tratado de Mercosur. Tres años más tarde (31/12/1994) entró en vigencia un mercado común de libre circulación de bienes y servicios con aranceles comunes y de fortalecimiento de la legislación, a la vez que se fijó una estructura funcional (no sólo de cooperación).

Peña, seguramente, pretenderá que el Mercosur tenga una institucionalidad profunda, para que deje de ser sólo un foro consultivo, económico y social que se limita a hacer recomendaciones, sobre la fijación de aranceles exteriores para lograr la libre circulación de factores productivos, en un marco de armonizaciones económicas, entre  la que figura un arancel externo común con alguna flexibilidad  en algunos productos como el de los automotores.

En el campo educativo, hay que hacer notar que en el Mercosur se ha trabajado con intensidad   para resolver  la problemática del reconocimiento de títulos y pasaportes.

En el 2000 se buscaron coincidencias  entre los gobiernos del Mercosur  en lo comercial, teniendo en cuenta lo logrado en el UNASUR, así como mediante el Fondo para la  Convergencia Estructural del Mercosur (FOCEM), llegándose así al 2016 a los fines de un Mercosur  globalizante. (Jackemate.com)

 

(*) Licenciado en Periodismo – Postítulo en Comunicación Política

 

 

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