Desde el Gobierno de Francia se denuncia una “matanza de una amplitud sin precedentes” en territorio de la República árabe de Siria, en la que, al menos, habrían muerto más de un centenar de personas en la localidad de Kafr Eid, según se desprende de un despacho de la agencia de noticias internacional EFE.
El Ministerio galo de Exteriores galo denunció este miércoles que el pasado martes hubo en Siria "una matanza de una amplitud sin precedentes", que causó más de cien muertos, por lo que se urgió a Rusia a que acelere el ritmo de las negociaciones en el Consejo de Seguridad de cara al proyecto de resolución que exija el fin de la represión.
"Debe ponerse todo en marcha para cesar esta espiral de muerte que (el presidente) Bashar El Asad aplica cada día sobre su pueblo", dijo un portavoz de ese departamento.
Según el mismo departamento, "ante este contexto dramático, Francia llama a que se incremente todavía más la movilización de la comunidad internacional".
Para el Ministerio de Exteriores francés es "imperativo" que Damasco acepte el despliegue inmediato de observadores de la Liga de Estados Árabe y que les permita comprobar la "aplicación integral" del plan árabe en sus cuatro puntos.
En ese acuerdo, según recordó el representante ministerial, se incluye el fin de la represión, la liberación de todos los prisioneros políticos, la retirada del Ejército a los cuarteles y el acceso de los medios internacionales al territorio.
"Damasco debe responder sin demora y sin prórroga a cada uno de los puntos del plan de acción", recalcó el portavoz, que transmite también la demanda de Francia de que "Rusia acelere el ritmo de las negociaciones en el Consejo de Seguridad sobre el proyecto de resolución".
Al menos 111 civiles murieron en la localidad de Kafr Eid, en la provincia septentrional de Idleb, por la represión de las fuerzas leales al régimen de Damasco; mientras que desde marzo, cuando estallaran las protestas, la represión y violencia se han cobrado la vida de más de 5.000 personas, según cifras oficiales de Naciones Unidas.
El pasado jueves, Rusia, que junto con China se opone a esa condena, presentó un proyecto de resolución en el que anima al Gobierno de El Asad a iniciar reformas y pide el cese de la violencia, pero los miembros occidentales del máximo órgano de decisión de la ONU lo calificaron de insuficiente. (Jackemate.com)