Otra vez la violencia de grupos fundamentalistas religiosos causa muertos y heridos en Bagdad. Nuevamente la muerte y el horror transitan por las calles de la capital de Irak. En esta ocasión, al menos cincuenta y dos personas murieron y otras 67 resultaron heridas durante la liberación de los rehenes retenidos por un grupo de hombres armados que responderían a Al Qaeda en una iglesia del centro de Bagdad, confirmaron fuentes policiales iraquíes.
Según un despacho de la agencia de noticias internacional española EFE, las fuentes explicaron que las víctimas se produjeron durante los enfrentamientos entre agentes de
Entre los muertos se encuentran los cinco atacantes que llevaron a cabo la agresión, siete policías y otras 28 personas, entre ellas rehenes y civiles.
Las fuentes agregaron que algunos heridos se encuentran en estado grave.
El ministro de Defensa iraquí, Abdel Qader Mohamed Yasem, aseguró a la prensa que la liberación de los rehenes, que duró dos horas, se llevó a cabo "con éxito".
Yasem afirmó que los atacantes pedían la puesta en libertad de algunos encarcelados en Irak y Egipto, y agregó que algunos de los agresores no eran iraquíes.
Este último domingo, la policía informó en un primer momento de que habían muerto siete personas y 20 habían resultado heridas en un enfrentamiento con un grupo de insurgentes, que se refugiaron en el templo después de lanzar un ataque contra la sede de
El grupo terrorista autodenominado ‘Estado Islámico de Irak’, un conglomerado de grupos armados dirigido por Al Qaeda, se ha responsabilizado del ataque.
En un comunicado difundido por esta red terrorista aseguró que había llevado a cabo el ataque para exigir la liberación "de las musulmanas detenidas en las cárceles de los cristianos de Egipto".
Estas exigencias parecen estar relacionadas con una reciente polémica desatada en Egipto por la supuesta conversión, más tarde desmentida, de una cristiana al Islam, identificada como Camelia Shahata.
Shahata se refugió o fue retenida en un monasterio, según las distintas versiones, lo que desató protestas de la mayoritaria comunidad musulmana en el país, que exige que sea liberada por
Según el comunicado del ‘Estado Islámico’ en el ataque murieron más de treinta "infieles", en referencia a las víctimas cristianas.
"Que el gobierno apóstata sepa que se ha encendido la mecha de la campaña contra los cristianos de Irak", subraya la nota del grupo.
Antes, los milicianos habían atacado
A las puertas del edificio, los terroristas hicieron explotar dos coches bomba. Cuatro individuos entraron poco después en la iglesia, cercana al edificio de la bolsa, después de enfrentarse con las fuerzas iraquíes que pretendían repeler el ataque.
Los terroristas reclamaban al Gobierno que liberase a una serie de presos en Irak y Egipto a cambio de los rehenes. Las autoridades desalojaron y acordonaron la zona próxima al centro de culto, y más adelante ordenaron a los secuestradores que liberaran a los feligreses bajo la amenaza de irrumpir en la iglesia.
Tras varias horas en tensa calma, "se desató el infierno", narra Martin Chulov, periodista del diario británico ‘Guardian’ que presenció la escena.
Este asegura que en la operación participaron unidades norteamericanas, pero Bloom sostiene que dichos efectivos solo suministraron aparatos de vuelo no tripulado para tomar imágenes desde el aire. (Jackemate.com)