El Gobierno Nacional confirmó en Rosario su política antiferroviaria en torno de restituir los trenes de pasajeros en los principales nodos del país como en el sur santafesino, a excepción de Capital Federal y el Área Metropolitana del Gran Buenos Aires, al anunciar en la sede de la Bolsa de Comercio rosarina, con platillos y bombos, la puesta en marcha del nuevo sistema de operación abierta de trenes de carga para bajar los costos logísticos del transporte en la cadena productiva y el desarrollo de las economías regionales
El Ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, además, adelantó una inversión total de 8.800 millones de dólares en el sistema ferroviario de cargas para renovar un total de 9.850 kilómetros de vías, generando 70.000 empleos directos, según el funcionario macrista.
La gestión gubernamental liderada por Mauricio Macri no deja de expresar políticas unitarias y centralistas en relación con temas ferroviarios, al menos, y sólo se manifiesta a favor de los trenes de cargas, la construcción de autopistas y el ingreso de líneas aéreas de bajo costo para el interior de la Argentina.
Mientras en los países del Primer Mundo y en los emergentes, como Chile y Perú, existen políticas públicas activas en favor de la reactivación de los trenes de pasajeros, como una manera de movilizar más rápido, seguro, no contaminando el medio ambiente y a costo menores que otros servicios, el macrísmo con su ministro de Transporte a la cabeza no deja de dar señales anti-ferroviarias en cuanto al transporte de pasajeros.
Ya no pareciera, sino que lo confirma a diario el Gobierno nacional, que sólo está interesado y así lo expresa en mejorar el sistema ferroviario para pasajeros únicamente en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y para el Área Metropolitana del Gran Buenos Aires (AMBA).
Dietrich, en su visita a la Bolsa de Comercio de Rosario, señaló que "a partir de hoy, estamos transformando un sistema que va a cambiar profundamente la estructura productiva de nuestro país. Por primera vez, por decisión del presidente Mauricio Macri, tenemos una mirada profunda en un punto estratégico para el desarrollo que es la logística, permitiendo que crezca la construcción y el empleo, y generando oportunidades infinitas e impensables para cientos de miles de productores y fabricantes de bienes en distintos lugares del país.
Dijo que con el nuevo sistema de operación más las inversiones, se proyecta quintuplicar el potencial de carga del sistema ferroviario para 2031 porque “en 2015, en uno de sus puntos históricos más bajos, el tren de cargas transportó 18,4 millones de toneladas, y en los próximos años se proyecta llevar la capacidad del sistema a 97,9 millones, incrementando de esta manera no sólo la cantidad de carga en toneladas sino además la variedad de productos y las condiciones operativas para ampliar el volumen, beneficiando tanto a la agroindustria como la construcción, los productos con origen y destino Vaca Muerta, y las cargas en general.
El jefe de la cartera de Transporte de la Nación desde el inicio de la gestión macrista se lo venía diciendo en “off the record” a funcionarios provinciales santafesinos y de la Municipalidad rosarina que se abstuvieran de pedir trenes de pasajeros y tranvías para esta región provincial porque “sólo había políticas en favor del sistema de metrobuses”.
Alberto Padóan, presidente de la Bolsa de Comercio local, en el acto de presentación del proyecto nacional de cargas por ferrocarril, también se refirió a la reducción de costos que implica para el sector primario el sistema de acceso abierto.
“Por ejemplo, un productor agropecuario de una zona cercana a la ciudad de Tucumán, a 830 km del Gran Rosario, en la actualidad paga por trasladar en camión sus granos a los puertos y fábricas de la región 7 centavos de dólar la tn/km. Con el nuevo sistema ferroviario debería pagar una cifra cercana a los 4 centavos de U$S la tn/Km. Esto implicaría un ahorro de costos de flete de 23 U$S aproximadamente por cada tonelada transportada, según estudios de nuestra institución”, aseguró.
Y agregó: “Esos 23 U$S/tn representan una mejora 19% en el precio que hoy le pagan por el maíz neto del flete camionero. En soja esa mejora es del 10% y en trigo del 12%”.
El anuncio es un primer paso en el proceso de implementación en diferentes etapas, que comienza con su puesta en marcha y reformas institucionales necesarias en el sistema (nueva normativa técnica, arbitrajes, control de tráfico, regulación de servicios y peajes, entre otros), el avance progresivo de las inversiones en la red de cargas y la progresiva transición y migración hacia la operación abierta hacia 2023.
Este sistema de acceso abierto se implementó exitosamente en otros países como Australia, Alemania y el Reino Unido, donde luego de la puesta en marcha del nuevo mecanismo, la participación del ferrocarril en el volumen total de cargas transportadas se incrementó en un 5% en los dos primeros países y en un 4% en el segundo; mientras que al mismo tiempo se redujeron las tarifas por el servicio en un 36, 13 y 3% respectivamente para cada país. (Jackemate.com)