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Por Ricardo Marconi (*)

En casi la cúspide del desarrollo del conflicto Rusia-Ucrania, entendemos necesario hacer algunas consideraciones sobre el desenvolvimiento de las mafias rusas (Bratvá) con las que se maneja el presidente de la Federación Rusa Vladimir Putin.

Los orígenes de Rusia y la Rus de Kiev se remontan a la palabra rus que aparece en un texto franco del siglo IX. En ese texto se lo identifica con los suecos y, más tarde, en el siglo XII se escribe la Primera Crónica Rusa, donde se identifica a ese pueblo con los Varegos (vikingos suecos). 

La teoría más aceptada es que estos suecos llegaron a la actual Ucrania y se mezclaron con la población eslava local formando la clase dirigente.

El origen de Ucrania 

Así se fundó la Rus de Kiev, estado que es considerado el origen de Ucrania, Rusia y Bielorrusia por sus habitantes. Con el tiempo, el Estado se fue desmembrando en otros más pequeños, situación que se vivió hasta el siglo XIII, cuando los mongoles conquistaron la zona de la Siberia del este, hasta colonizar la cuenca del río Obi.

Rusia bajo el poder de los mongoles, Iván III y IV 

Vale fijar la fecha del final del dominio mongol en 1480, tras la batalla del río ruso Ugrá, en que la coalición de ciudades estado rusas, lideradas por Iván III de Rusia, primero en adoptar el título de soberano de toda Rusia por sus amplias conquistas, realizadas mediante el principado de Moscú, durante su reinado.

Iván III comenzó la conquista hacia el este y en 1530 la frontera rusa se extendió hasta el río Pechora por el norte. El primer zar de Rusia, Iván IV, se lanzó hacia el sur y conquistó la ciudad de Kazán y los vestigios del kanato mongol de la denominada Horda de Oro.

Iván, el conquistador 

Iván IV, el Terrible, conquistó Kazán y las cuencas de los ríos Volga y Kama, iniciándose así la que se entiende como “la gran colonización de Siberia”.

La conquista partió de la iniciativa privada a través de las que se consideraban familias de alto poder adquisitivo que vieron como enormes los recursos que ofrecía el territorio que nos ocupa.

Rusia, a pesar de estas ventajas no avanzó en la gestión de Iván e, incluso, llegó a perder territorios durante el siglo XVI.

La hora de la expansión 

Más rápido fue el avance logrado en el siglo XVII, cuando tras 25 años se llegó al Mar de Ojotsk y en 1639, se alcanzó el Océano Pacífico.

El único enemigo de fuste que enfrentaron los rusos fueron los mongoles del kanato de Siberia, al que finalmente vencieron para encontrarse frontalmente con el ejército chino, bien entrenado y dotado de armas de fuego, por lo que tuvieron que frenar su avance en esa época moderna.

De todas maneras, Rusia incrementó su territorio en 1790 con asentamientos en Alaska, región que controló hasta que la vendió a Estados Unidos en 1867.

Esa no fue la única colonia rusa en el Nuevo Mundo. Consiguieron fundar una ciudad en California, rodeada de territorio español –Fort Ross-, que duró desde 1812 a 1848.

El reinado de Catalina II 

En el transcurso del reinado de Catalina II La Grande se llegó al Mar Negro, luego de la guerra contra el Imperio Otomano y también consiguió obtener territorios en lo que hoy es Polonia y Ucrania.

Ya en el siglo XIX, Rusia conquistó Finlandia, luego de mantener una guerra contra Suecia y lo que hoy es Moldavia, luego de otra guerra con el imperio turco. Avanzó por el Cáucaso, por Manchuria, Asia Central –Kazajistán, Uzbequistán y Turkmenistán-, y fue en ese momento histórico que vendió Alaska a EE.UU., tras lo cual, en 1875, perdió las islas Kuriles a favor de Japón.

Rusia colonizó Hawai 

Es más, Rusia tuvo una colonia en el archipiélago de Hawai, pero no pudo mantenerse en el tiempo por conflictos internos en Rusia. Las islas Jónicas también fueron un protectorado ruso desde 1899 hasta 1807 y la ciudad montenegrina de Kotor fue parte del territorio ruso, aunque sólo por un año, a pesar que tenían los rusos el apoyo de la población debido a que compartían la religión ortodoxa.

Nacen la URSS y las mafias 

Cuando nació la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), muchos territorios del Imperio Ruso consiguieron el estatus de repúblicas dentro de la federación. Cuando este estado se desintegró, muchos de ellas se independizaron, dando forma a la Rusia de hoy día.

Con el desarrollo de la URSS se inició el camino delictivo a gran escala a partir de las mafias búlgaras y kosovares que se hicieron poderosas en España.

Vale apuntar que pertenecer al crimen organizado ruso implica que se puede cruzar la frontera, mientras que para la población discriminada se convirtió ello en una problemática mientras se mantenían las fronteras cerradas, ya que para los trabajos de poca calidad había una orden que impedía el paso de límites entre territorios y debido al incremento de la inmigración, esa circunstancia se agravó considerablemente.

Analistas de relaciones internacionales han expresado que la ausencia de Estado permitió el robo de inmensos recursos naturales del país. Y en razón de esa circunstancia el dinero queda en la porción más alta de las organizaciones mafiosas, aunque todo es callado porque los más necesitados consiguen empleo.

Mafia Rosa 

De esta manera, la mafia logró la conducción de la transición al capitalismo, debido a que el Estado era incapaz de hacerlo en Europa del Este. El “exitoso gánster ruso” fue el que se hizo responsable del cambio revolucionario y surgió de esta manera la “Mafia Rosa”, formada por delincuentes que se dedicaron a proveer de empleos cuando todo se disgregaba y los políticos, como de costumbre “se borraban”.

La Unión europea no se privó de devolver, desde distintos países, que la conformaban, a muchos albaneses refugiados y ese mecanismo sirvió para reducir el dinero ilegal proveniente de las remesas de drogas y el tráfico ilegal de capitales.

A pesar que, en algunos casos, cuando a las mafias rusas “les cortaban la cabeza y el capo era detenido”, el “cuerpo” seguía funcionando porque tenía la capacidad de detectar lo sitios donde se generaban nuevas oportunidades y, sobre todo, hay que resaltar que en los 90 se produjo una inmigración enorme de judíos rusos que alcanzó el 15 por ciento de los habitantes de Israel.

Los israelíes hablaban otro idioma y tenían valores culturales diferentes, con un sentido de identidad superior al de los otros inmigrantes. Contrajeron nuevos hábitos de consumo, entre ellos un flujo muy importante de narcóticos y de tráfico de mujeres que fue una industria enorme.

Los rusos vieron la oportunidad de su desarrollo económico ilegal por intermedio de la mafia estatal y privada y sus compañías llegaron a un acuerdo de intercambio con Serbia.

La mafia rusa y los servicios de inteligencia

Rusia es un mastodonte que ocupa un tercio del continente: Asia (75% del territorio ruso, aproximadamente), y alrededor del 40% de Europa (25%). Con sus más de 17millones de kilómetros cuadrados, es un noveno de la tierra emergida del planeta. Tiene once husos horarios y una mafia al borde del descontrol, con analogías con los servicios secretos e, incluso, con la francmasonería.

Los tatuajes de la mafia rusa (Bratvá) con las águilas imperiales zaristas y la Iglesia Ortodoxa rusa

En este sentido debemos hacer mención a la omertá, la que es comparable al deber de silencio impuesto por las obligaciones jurídicas del secreto militar.

Xavier Raufer, un especialista en el tema, asegura que “las dos instituciones se afirman y se ocultan a la vez. La mayoría de las actividades criminales se afirman y se ocultan a la vez y los medios sólo difunden algunas operaciones”, de lo que se infiere que las mafias y los servicios, en ocasiones, pueden establecer peligrosas alianzas.

“Dicha semejanza debería tenerse en cuenta en la implementación de la represión y la vigilancia estatal”, agregó Raufer.

Los servicios secretos son los que pueden tener un conocimiento continuo de una mafia, La labor natural de la policía condena al Estado a una comprensión aleatoria episódica de adversario permanente y organizado como un contra estado.

El arrepentido siciliano Leonardo Messina reveló que los capos más importantes de la Cosa Nostra estaban afiliados a la logia masónica, lo que les permitía entrar en contacto, de manera discreta, con políticos, policías, jueces y empresarios.

La guerra de Rusia-Ucrania y la mafia 

Las agencias internacionales de noticias están dando cuenta de los negocios de la mafia en tiempos de guerra, en el marco de una evacuación civil de Ucrania que se incrementa hora a hora.

La mafia ya está especulando con la crisis de los mercados a través de la especulación de los precios y la venta de armas mediante canales militares ilegales que han permitido generar nuevos mecanismos especulativos del crimen organizado, los que obvian la obtención de liquidez bancaria.

Es una situación ideal para las pandillas que se desenvuelven en mercados paralelos para esquivar sanciones y bloqueos, así como el control de autoridades internacionales.

Extraoficialmente ya se menciona a la Ndrangheta como la que estaría obteniendo un beneficio del 15 % de los beneficios totales, sobre todo gracias al tráfico de armas, actualmente de unos mil millones de dólares, según la agencia ANSA.

La organización mafiosa aludida también se especula que ganará por las inversiones financieras “legales” con un ingreso calculado en un 5 %, esto es alrededor de 2.000 millones de euros.

El negocio de la energía está previsto que arroje una cifra similar y un incremento en ese sector específico del 12%.

Las mafias están también pensando ya en el negocio de la posguerra con la reconstrucción de Ucrania. Al menos es lo que ya tienen previsto que ocurrirá en las previsiones de la inteligencia de la NATO.

Mafia y petróleo en Serbia 

Debido a que los rusos tuvieron la oportunidad de poner en marcha su desarrollo económico ilegal, en Belgrado, capital de Serbia, se logró intercambiar por petróleo los excedentes agrícolas por un valor de entre 100 y 200 millones de dólares anuales, comercio del que la mafia local se vio beneficiada.

En una ciudad cercana a Serbia, de mayoría albanesa, que era el centro de distribución de heroína que viene desde Bulgaria, la droga fue introducida por mafias turcas para ser vendida a grupos albaneses y serbios.

Era una ruta que pasaba por Kosovo, Macedonia y entraba a la Unión Europea a través de la península itálica. Algunos cargamentos iban hacia el norte, a través de Belgrado, luego a Austria y finalmente a Alemania. Algunos especialistas en el tema sostienen que “el mecanismo aún se mantiene”. 

Kosovo 

Con el tiempo, se convirtió la República de Kosovo –donde la mafia rusa metió la uña-, en la Colombia de Europa, aunque no es productora de cocaína. Sí es un punto central de distribución de heroína y trata de personas.

Es también un territorio donde se reclutan recursos humanos dispuestos a delinquir formando parte de la criminalidad organizada. A pesar de ello, desde 1999, con el protectorado de las Naciones Unidas, el producto bruto interno de Kosovo comenzó a disminuir. Hasta marzo del 2020, al menos, las agencias de turismo habrían tenido incorporado un tour con visita al burdel incluido.

Albania

“No siempre es posible satisfacer las aspiraciones materiales de la gente. Sobre todo, en los países en desarrollo, a través de métodos legales que permite la globalización. Un ejemplo es el de Albania, que se hundió en los mercados del este europeo, en los que tenía exportaciones cruciales como los cítricos.

Trató entonces de vender naranjas y limones en Europa occidental, pero no pudo porque la política común protege a los cultivadores de Portugal, España Italia y Grecia y no logró competir con esos subsidios. Así, muchos productores destruyeron los cultivos de cítricos y plantaron cannabis a cambio y lo venden en cantidades industriales”.

En Albania el petróleo se enviaba por oleoductos mediante la frontera septentrional, por carreteras en caravanas de vehículos, utilizando depósitos extras y en las montañas con burros cargados con barriles en el período 1993/94. Las barcazas transportaban petróleo desde Ucrania.

Bulgaria 

El Servicio de Inteligencia de Bulgaria alertó, en su momento, al mafioso Illya Pavlov para que utilizara trenes del gobierno ruso, a los fines de enviar millones de litros de petróleo a Serbia.

Pavlov, hacía circular el “oro negro” bajo protección del CIC, uno de los mayores servicios mafiosos de protección de Bulgaria, ya que los guardias fronterizos cobraban sueldos miserables y por ello eran fáciles de comprar.

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) avisó a funcionarios de la ciudad de Sofía, que debía despedirse de los 1.000 millones de dólares que le debía el régimen de Saddam Hussein, cuando impuso sanciones a Bagdad y luego le dijo que no podía enviar sus camiones vía Serbia.

Bulgaria tenía un PBI de 10.000 millones de dólares y al perder su comercio de frutas con Europa Occidental autorizó que Bulgaria utilizara un convoy semanal con frutas que se trasladaría bajo custodia búlgara.

La mafia en Yugoslavia 

El mafioso Vladimir Vanja Bokán comenzó a importar petróleo a Yugoslavia, con una red espectacular de contactos, limitados en su accionar, aunque luego fue imitado por otros mafiosos, por lo que el ex presidente estadounidense Bill Clinton tuvo que admitir su error pagando las consecuencias, ya que en las barcazas rumanas se enviaba petróleo importado de baja calidad y navegaban llenas y al borde del naufragio.

Sería lógico pensar entonces que dominar tanto territorio sería un proceso largo. En cierto modo, sí, siglos. Pero mucho menos de lo que se espera. La posesión de tan vastas tierras se llevó a cabo en relativamente poco tiempo. (Jackemate.com)

 

(*) Licenciado en Periodismo – Postítulo en Comunicación Política

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