Estaba tomando un café, como siempre en uno de los bares de la zona costera céntrica rosarina, cuando se me acercó un amigo peronista que, medio contento, me dijo “tengo una noticia sobre el peronismo rosarino para vos que te caerás de espalda cuando la escuches”. Dale Charly decime lo que tengas que contarme, le dije mientras tomábamos un café en esta sabatina mañana lluviosa y gris rosarina.
“Todavía no lo saben muchos, pero José Imhoff mide mejor que otros candidatos del mismo signo. Fue encuestado y qué resultados que tuvo”, me contó Charly, que en ese momento casi se atraganta con una melosa media luna que intentaba deglutir de un solo mordiscón.
Rápidamente le dije que se tranquilizara y me relatara esos números que había conocido sobre Imhoff sobre otros precandidatos peronistas o del abanico peronista rosarina.
“José Luis está medio punto por encima del Tigre (Héctor) Cavallero y un punto y medio por arriba del concejal Diego Giuliano”, me apuntó.
Tras preguntarle si estaba seguro, “pero claro Alfil. Vos te crees que te voy a dar pescado muerto”, fue su respuesta ante mi duda por los números que me daba.
Actualmente, el ex director técnico del equipo nacional de rugbier ‘Los Pumas’, junto con Pedro Cerruti y otros amigos del PJ rosarino, están en pleno proceso de armado de un movimiento exclusivamente rosarino no kirchnerista, no reutemanista y tampoco obeidista, por eso mantienen esa baja imagen pública.
“¿Sabes como crecerán los números cuando se conozcan en febrero los precandidatos de este movimiento leal a los postulados peronistas?”, fue su pregunta con despedida acompañada.
Me quedé pensando, y en voz baja repetía: ¿Estará cambiando tanto el electorado rosarino? Bueno, para esa inquietud aún no tengo respuesta y cuando le quise preguntar de dónde habían salido esos números. Charly mientras se alejaba de la mesa en dirección a la calle, me dijo: “Fue un amigo mío, hijo de un turco rosarino quien me lo contó, y la unión hace la fuerza”. (Jackemate.com)