“Hoy es un día de fiesta, donde todos los que hemos cumplido esta jornada tan importante nos sentimos con enorme satisfacción porque sabemos que estamos cumpliendo con nuestro deber”, sostuvo el líder de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, al hacer un balance ante el periodismo de la medida de fuerza desarrollada en todo el territorio argentino
Sostuvo que el nivel de acatamiento al paro nacional fue “mucho mayor” a lo que preveían y pidió a la presidenta Cristina Kirchner que “escuche el silencio de las calles”.
Y agregó: “Sin ninguna duda ha sido una jornada que ha tenido una adhesión mucho mayor que lo que imaginábamos”.
Por ello el dirigente de los camioneros aseveró que “realmente se ha expresado en el vacío que hemos encontrado en la ciudad, en los establecimientos, en las rutas”, para luego sostener que “ha sido una jornada realmente importantísima, y yo me imagino que el silencio de las calles y en las empresas es la voz que el Gobierno debe escuchar”.
Moyano también envió un mensaje a la CGT oficialista del metalúrgico Antonio Caló, al señalar que “seguramente otros no sentirán la misma satisfacción de defender los intereses de los trabajadores”, comparando la gestión de la presidenta Cristina de Kirchner con la última dictadura militar.
“Como ocurre siempre desde la épocas de los militares se intenta desvirtuar el reclamo de los trabajadores con funcionarios de cuarta que dicen cualquier disparate”, dijo el jefe cegetista.
En Rosario
El paro nacional se hizo sentir a puro piquete en Rosario con cortes en avenida Circunvalación y en los accesos a Rosario que complicaron la circulación y provocaron un caos vehicular que se profundizó hasta el mediodía.
Luego de esa hora, y ya terminada la marcha local, se flexibilizaron los cortes al paso de los vehículos particulares y en el centro se levantó la mayoría de los que se montaron.
Desde el primer minuto del martes el tránsito estuvo cortado en avenida Circunvalación, arriba y abajo, a la altura de Ayacucho, Perón, Córdoba, Pellegrini, Ovidio Lagos, Oroño, Baigorria y el acceso a la ruta 34.
También había bloqueos en los accesos a las autopistas a Santa Fe, Buenos Aires y Córdoba, donde había previstos desvíos para los automovilistas.
En un relevamiento matutino de la Agencia de Seguridad Vial de la provincia se indicó que la situación en Rosario era "la más complicada en la región" con motivo de los piquetes enmarcados en el paro nacional. A la tarde seguían los cortes en los accesos, pero la circulación era mucho menos caótica que lo que se esperaba.
El puente Rosario-Victoria estuvo cortado en ambas manos del lado entrerriano y no se podía circular por esa conexión. También hubo una interrupción desde la cero hora en la ruta nacional 11, en el kilómetro 432, a la altura de La Ribera. En esa misma vía hubo distintos cortes desde Fray Luiz Beltran hasta San Lorenzo.
La Unión Tranviarios Automotor (UTA) no se sumó al paro y aunque el transporte se preveía normal en Rosario, algunas líneas urbanas se vieron afectadas en su funcionamiento.
Se trata de las 103, 142 y 143 que trabajaron durante horas con la mitad de la flota, ya que la punta de línea está en Villa Gobernador Gálvez y por los cortes no pudieron salir de esa localidad los coches necesarios para cubrir el servicio.
En tanto, el transporte interurbano tampoco funcionó con normalidad debido a la misma causa. No circulaban las líneas 35/9, la M y los expresos, entre otros
Más opiniones sobre la medida
Por su parte, el titular de la CTA Pablo Micheli se esperanzó en que el Gobierno tenga la “madurez política” que mostraron las centrales sindicales, quienes -sostuvo- pese a sus “diferencias” se pusieron “del lado de los trabajadores”.
Aseguró que “esto demuestra que el Gobierno ha perdido el control de los gremios, por eso debería que hacer lo que hicimos nosotros y juntar esta diversidad, porque tenemos diferencias entre nosotros, pero esas diferencias no nos impidieron para ponernos del lado de los trabajadores”.
E indicó: “Ojalá el Gobierno tuviera esta madurez política y se sentara con quienes no pensamos igual. Todos los problemas que nos llevaron a este paro son absolutamente justos”.
Finalmente, el sindicalista Carlos Acuña, en representación de la CGT ‘Azul y Blanca’ que lidera el gastronómico Luis Barrionuevo, aseguró que “la CGT es una sola y va a estar unida en la acción para defender a los trabajadores”.
En tanto el dirigente de APTA, Ricardo Cirielli, dijo que “la Presidenta debe dejar la soberbia para lograr humildad, a este Gobierno (nacional) le hace falta humildad para escuchar a los trabajadores. Este conflicto va a continuar y va a incrementarse la lucha si no tenemos soluciones”.
Desde la ‘Rosada’
Desde la ‘Casa Rosada’, el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, aseguró que no hay paro, sino “un piquetazo”, ya que “se cortaron accesos y vías de ferrocarriles”, para que la gente no pueda ir a trabajar.
“Lamentablemente no hay ningún paro. Un paro es cuando los obreros y los empleados deciden no acudir a sus lugares de trabajo. Esto es un piquetazo, en el que los que logran ir a trabajar son apedreados, como estamos viendo en el centro porteño”, concluyó Abal Medina en declaraciones radiales que reprodujo la agencia de noticias estatal ‘Télam’. (Jackemate.com)