El Gobierno estadounidense hizo el anuncio formal de otorgar la suma de un millón de dólares por quien le entregue datos ciertos de Hamza, el hijo del ex líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden, quien fuera asesinado por el accionar de un comando especial la madrugada del 2 de mayo de 2011, en la llamada ‘Operación Gerónimo’, en una casa cercana a la escuela militar pakistaní
Quedó grabada a fuego, en la retina de los norteamericanos, la imagen de las máximas autoridades norteamericanas -entre ellas la del presidente-, siguiendo el operativo de captura y muerte del padre de Hamza, en Pakistán, en 2011.
El hijo del terrorista no se hallaba en el recinto del complejo de Abbottabad, donde su progenitor fue abatido por fuerzas especiales, luego de que Osama aprobara los atentados del 11 de setiembre de 2001, que dejaron una estela de muerte con 3.000 abatidos.
Hoy Hamza, de 30 años, sería el líder de la organización militante islamista, creada por su progenitor, al decir del Departamento de Estado norteamericano.
El buscado para su eliminación lisa y llana, “ha difundido mensajes de audio y vídeo en los que llama a lanzar ataques contra Estados Unidos y sus aliados occidentales”, reza la ficha que ofrece la recompensa. Vale hacer notar que Argentina es uno de los aliados.
La BBC ya hizo saber que Hamza y su medio hermano Saad bin Laden, fueron insertados en las nóminas de terroristas global en Estados Unidos hace dos años, mientras que Khairiah Sabar esposa de Osama fue detenida en 2011.
El buscado, hijo favorito de Osama, se casó con la hija de Mohammed Atta, uno de los pilotos de los cuatro aviones secuestrados para los ataques del 2001 y que fue estrellado en una de las torres del World Trade Center, en Nueva York.
Actualmente se estima que ha vivido en Pakistán, Afganistán o Siria e incluso Irán, donde se casó y comenzó a involucrarse en la organización terrorista, luego de ser preparado intensamente por su padre.
Prueba de ello es que en un vídeo realizado en 2005, se lo mostraba participando de un ataque de Al Qaeda con fuerzas policiales de Pakistán en la frontera con Afganistán.
Es más, publicó poemas en los que se instaba a destruir a Estados Unidos,el Reino Unido, Francia y Dinamarca. En 2015 se conoció su primer mensaje de voz destinado a los seguidores de Al Qaeda en Bagdad, Kabul y Gaza para que emprendan la yihad en las principales capitales de Europa y Medio Oriente.
Incluso, en 2016 hizo lo propio pidiendo la “liberación” de Jerusalén y la revolución en Siria. En julio de ese año emitió un discurso de venganza por la muerte de su padre.
Otra búsqueda del FBI
Casi paralelamente con lo antes aludido, se sabe ahora -investigación periodística de por medio-, que el FBI lanzó la búsqueda global de Mónica Elfriede Witt, una ex agente de la Fuerza Aérea Norteamericana que ha sido acusada de conspirar contra la defensa nacional de EE.UU, luego de llevar adelante numerosas operaciones encubiertas en Irak, Arabia Saudita y Qatar, tras lo cual “se pasó al enemigo iranio”.
Su nombre encubierto era “Tormenta rebelde” y se especializaba en contrainteligencia, tras estudiar persa.
Luego de ser captada y comenzar a trabajar como “gente doble”, fue asignada a la embajada iraní en Kabul, Afganistán, desde el 2013.
Witt ha sido imputada de dos cargos de espionaje, ya que proporcionó detalles secretos de operaciones de inteligencia estadounidense.
La inteligencia norteamericana estima que actualmente reside en Irán y los fiscales estadounidenses que trabajan en esa temática han señalado que China intentó reclutar espías estadounidenses, sin lograr su objetivo. (Jackemate.com)
(*) Licenciado en Periodismo – rimar9900@hotmail.com