La problemática de la inmigración, a nivel mundial, tiene su correlato en nuestra ciudad y en tal sentido mucho tiene que ver el programa Siria
El delegado de la provincia de la Dirección Nacional de Migraciones, Germán Pugnaloni indicó que es un programa interministerial, de integración entre distintas áreas del Gobierno, entre las que se cuentan los ministerios del Interior, Relaciones Exteriores, Desarrollo Social, Educación, Trabajo, Salud, Justicia, Seguridad, Cultura y la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), así como los Cascos Blancos.
Cuando se anunció el Programa Especial de Visado Humanitario para Extranjeros Afectados por el Conflicto de la República Árabe Siria, el presidente Macri expresó la disposición de recibir a 3.000 personas. A ese momento había 362 solicitudes aceptadas.
Filtros y Mesas de Trabajo y autovalencia
El primer filtro que se le aplica a los refugiados sirios tiene que ver con la seguridad, ya que desde el inicio del conflicto bélico 6 millones de personas dejaron Siria y hay otros 7 millones de desplazados en el propio territorio.
Rosario no sólo cuenta con mesas de trabajo sobre el tema, también ocurre lo propio en Mendoza, Córdoba y en la Provincia de Buenos Aires.
Allí se hace el seguimiento de los admitidos, esto es en concreto entrevistas. A ello se suma el proceso de integración tras la recepción y la tramitación de la documentación (DNI), a lo que se suma el acceso al sistema de salud y el aprendizaje del idioma español. Finalmente se fortalece el proceso de “autovalencia”.
Siria es el país con mayor número de refugiados – 6.3000.000-, y hay un número mayor en movimiento por el interior sirio.
No ha sido posible medir el número de personas que han perdido todos sus bienes.
Aquí llegamos al punto de formular aclaraciones que consideramos imprescindibles: De los 3.000 sirios que se planificaba ingresar, sólo llegaron 340 escapando de la guerra y teniendo en cuenta que el plan se inició en 2014, al 2017 se llegó al 10 por ciento de lo planificado.
En Argentina hay 3.300.000 árabes y 1 de cada 6 refugiados es de El Líbano.
Obviamente, hay análisis de perfiles para ubicar a los solicitantes por cuestiones de seguridad y para aprovechar sus conocimientos específicos.
Nos dicen que se analiza la posibilidad de habilitar padrinazgos para financiar estudios y las universidades abren cupos para ingresar a carreras y a cursos de idioma español.
También se trabaja en función de programas humanitarios. Algunos ya se iniciaron y otros están armándose, incluso, con perspectiva de género.
Actualmente, habría 170 sirios que iniciaron el trámite de reinserción y otros 400 ya fueron recibidos para iniciar gestiones.
Los informes oficiales admiten falta de presupuesto suficiente a nivel global para procurar la instalación definitiva de sirios y, para colmo, surgen cuestiones muchas veces insalvables en la frontera con el Líbano para coordinar tareas de inteligencia, a los fines de evitar que falsos inmigrantes sean en realidad infiltrados del terrorismo.
Otras fuentes hablan de escasa estructura en las provincias argentinas para los refugiados y, por último, se notan casos en los que existe poco interés en venir a Rosario.
Por el contrario sí se notan más ganas de ir a la ciudad de Buenos Aires, Córdoba, Salta, Mendoza, La Rioja y Santiago del Estero e incluso Tucumán y San Luis.
Respecto del programa Siria resta agregar que para llevar este plan adelante, el gobierno argentino contó -y cuenta-, con el apoyo de los servicios secretos de Alemania, EE.UU, Israel y de la Agencia Federal de Inteligencia argentina (AFI), que tendría personal trabajando en el Líbano desde hace más de un año, tratando de optimizar el control de los sirios que desean venir a nuestro país.
Incluso, nos dicen, que de la Unión europea llegaron oportunamente a Argentina especialistas para colaborar con la capacitación de personas que se deben dedicar a recibir a los sirios en el marco de la denominada mesa Siria.
Cuestiones a considerar
Hay cuestiones que merecen ser tenidas en cuenta en esta columna, respecto del tema que evaluamos y que pueden resumirse con el aporte de datos concretos:
- En Argentina hay dos millones de personas nacidas en el extranjero.
- Argentina, en el 2010 cobijaba a 1.805.957 inmigrantes, de los cuales el 53% eran mujeres.
- Desde el 2004 al primer cuatrimestre de 2016 se resolvieron 1.609.071 radicaciones permanentes.
- 9 de cada 10 eran de Paraguay, Bolivia, Perú y Colombia.
- El 50% de todas las radicaciones solicitadas corresponden a personas de entre 22 y 35 años y el 83 por ciento fijan su residencia en la Provincia de Buenos Aires y en la Ciudad Autónoma.
- Con el conflicto generado en Venezuela, los habitantes originarios de ese país modificaron las estadísticas de manera radical y hoy lideran estadísticamente como inmigrantes llegados a nuestro territorio.
- En los últimos tres años lo hicieron 70.000 venezolanos y desplazaron numéricamente a los paraguayos y bolivianos, quienes por otra parte, comenzaron a regresar a sus países de origen.
- En Argentina, desde enero de 2016 a junio del corriente año otorgó 530.000 residencias a extranjeros.
- En 2016, precisamente, los venezolanos representaban el 6 por ciento y hoy el 25 por ciento.
- Entre los venezolanos que pretenden radicarse en nuestro territorio hay un alto porcentaje de médicos e ingenieros y su perfil al momento de pretender cruzar la frontera argentina es de individuos económicamente activos, fundamentalmente profesionales y técnicos o con estudios universitarios avanzados.
- Se estima que a fin de año nuestro país tendrá en su seno a 50.000 venezolanos.
¿En Rosario cómo andamos?
- En Rosario se solicitan 250.000 pedidos de residencia por año.
- Hay 2.200.000 inmigrantes en nuestro país, tanto de origen europeo como americano. Esto último, vale remarcar, en gran medida tiene que ver con la crisis venezolana.
- De todo lo apuntado, es más que evidente que la inmigración es considerado uno de los tres temas más importantes a nivel internacional.
- Habría un movimiento de 260 millones de inmigrantes a nivel mundial y estos, en su mayoría, buscan escapar de las guerras.
- El desplazamiento de habitantes afectados se incrementó en 70 millones, de los cuáles 40 millones se movilizan en el interior de sus propios países.
- Habría 25 millones de refugiados y, por día, 44.000 personas toman la decisión de dejar sus propiedades para escapar de situaciones de crisis.
- A nuestro país, eran mayormente analfabetos los que pedían ingresar para reasentarse.
- El A.C.N.U.R., en 2017 efectivizó 60.000 reasentamientos, estimándose que 3.000 son refugiados sirios.
- Argentina otorga una residencia bianual, con los mismos derechos civiles que tienen los argentinos. (Jackemate.com)
(*) Licenciado en Periodismo – rimar9900@hotmail.com