"El mundo necesita reconciliación en esta atmósfera de tercera guerra mundial que estamos viviendo", afirmó este sábado el Papa Francisco tras su llegada a Cuba para una visita pastoral de cuatro días que tiene también un enorme significado político. El Sumo Pontífice viajará luego desde la isla directamente a Estados Unidos, donde culminará su travesía por el Nuevo Continente
Tras su aterrizaje, fue recibido por el presidente de Cuba, Raúl Castro, a quien Francisco le manifestó "especial consideración y respeto a su hermano Fidel".
En su discurso de arribo, el Papa habló del reinicio de las relaciones bilaterales entre Estados Unidos y Cuba y brindó un mensaje de reconciliación.
Francisco se convirtió en el tercer papa que visita Cuba y es considerado un actor clave en el acercamiento de ese país con los Estados Unidos.
El Airbus A330-200 de Alitalia en el que viajó el Papa aterrizó unos minutos antes de las 17 (hora de la Argentina) en el aeropuerto ‘José Martí’ de La Habana, en el que le esperaban para la ceremonia de recibimiento Raúl Castro y el cardenal Jaime Ortega, máximo representante de la Iglesia católica en esa isla caribeña.
A su llegada a Cuba, Francisco elogió el histórico acercamiento entre la isla y Estados Unidos, un proceso en el cual él mismo es visto como un mediador clave.
"Desde hace varios meses, estamos siendo testigos de un acontecimiento que nos llena de esperanza: el proceso de normalización de las relaciones entre dos pueblos, tras años de distanciamiento", dijo Francisco al pronunciar sus primeras palabras en Cuba.
"Es un signo de la victoria de la cultura del encuentro, del diálogo", agregó el papa, y aseveró: "Animo a los responsables políticos a continuar avanzando por este camino y a desarrollar todas sus potencialidades".
Cuba y Estados Unidos retomaron sus relaciones diplomáticas el 20 de julio, tras más de medio siglo de ruptura y hostilidades ideológicas.
La visita pastoral del papa genera también grandes expectativas políticas, ya que Francisco hará un recorrido simbólico de un país a otro en la que es su primera visita a ambas naciones.
El Papa estará hasta el martes 22 en Cuba y viajará desde ahí a Estados Unidos, donde pasará seis días hasta el próximo domingo.
"Geográficamente, Cuba es un archipiélago que mira hacia todos los caminos, con un valor extraordinario como ‘llave’ entre el norte y el sur, entre el este y el oeste", dijo también el papa en el aeropuerto, donde fue recibido por el presidente Raúl Castro.
"Su vocación natural es ser punto de encuentro para que todos los pueblos se reúnan en amistad", agregó.
Antes, el primer pontífice latinoamericano había recordado también las visitas que hicieron a la isla San Juan Pablo II y Benedicto XVI en 1998 y 2012, respectivamente.
"La providencia me permite llegar hoy a esta querida nación, siguiendo las huellas indelebles del camino abierto por los inolvidables viajes apostólicos que realizaron a esta isla mis dos predecesores", dijo Francisco.
"Sé que su recuerdo suscita gratitud y cariño en el pueblo y las autoridades de Cuba", agregó.
"Hoy renovamos estos lazos de cooperación y amistad para que la Iglesia siga acompañando y alentando al pueblo cubano en sus esperanzas y en sus preocupaciones, con libertad y con los medios y espacios necesarios", aseguró.
Además, destacó el proceso de normalización de relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos, "un acontecimiento que nos llena de esperanza".
"Es un proceso, un signo de la victoria de la cultura del encuentro, del diálogo, del sistema del acrecimiento universal sobre el sistema muerto para siempre de dinastía y de grupos, como decía José Martí", expresó el Papa.
"Animo a los responsables políticos a continuar avanzando por este camino y a desarrollar todas su potencialidades como pruebas del alto servicio que están llamado a prestar en favor de la paz y el bienestar de sus pueblos y de toda América y como ejemplo de reconciliación para el mundo entero", continuó.
"El mundo necesita reconciliación en esta atmósfera de tercera guerra mundial que estamos viviendo", completó, utilizando un concepto al que suele echar mano.
El ex cardenal primado de la Argentina luego ascendió a un vehículo que lo trasladó por la principal avenida de La Habana hasta la sede de la Nunciatura, donde se alojará durante su estadía en Cuba.
En su largo paso desde el aeropuerto hasta la Nunciatura miles de cubanos con banderas del país y del Vaticano saludaron el paso de la comitiva escoltada por dos vehículos de seguridad.
En tanto, la presidenta de la Argentina, Cristina Fernández de Kirchner también arribó a la isla caribeña para participar de la principal misa que oficiará el Santo Padre en la plaza de la Revolución y reunirse con él a escasas semanas de celebrarse en el país los comicios presidenciales.
Jorge Bergoglio oficiará este domingo una misa en la emblemática Plaza de la Revolución de La Habana, tal y como hicieron sus predecesores.
Para dicha celebración se espera a decenas de miles de asistentes, a la que también asistirá Raúl Castro y CFK como invitada especialmente para la ocasión. (Jackemate.com)