La Congregación para la Doctrina de la Fe, que se ocupa de los eclesiásticos acusados de delitos graves, será el nuevo destino del arzobispo de Rosario, monseñor José Luis Mollaghan, según lo confirmó este lunes el nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig, a través de la agencia oficial católica AICA
El diplomático del Vaticano informó que Mollaghan permanecerá como administrador apostólico “sede vacante” con las facultades de obispo diocesano, tras ser removido por decisión del Papa Francisco del Arzobispado de Rosario, tras una investigación de su gestión eclesiástica.
Entre el 18 y 22 de noviembre y el 10 y 13 de diciembre del año pasado la Arquidiócesis de Rosario fue objeto de una “visita fraterna” del arzobispo emérito de Mendoza, José María Arancibia, por encargo de la Congregación para los Obispos.
Se trató de un informe “in situ” encargado por el Vaticano sobre presuntas irregularidades en el manejo de fondos de la Iglesia y de maltratos a laicos y sacerdotes, que habrían ocurrido en la arquidiócesis.
El desenlace de esta situación se produjo ahora con la virtual remoción del cargo para el arzobispo Mollaghan. Pese a que aún le restan 7 años para su jubilación en el cargo que debe abandonar, el movimiento de Mollaghan fue presentado como un ascenso por la agencia AICA.
Sin embargo, como publica el porteño matutino ‘Clarín’ se trataría de un caso de “Promoveatur ut amoveatur” o de “promoción para sacarlo de en medio”, según la fraseología común para estos casos dentro de la Iglesia.
En un comunicado oficial difundido a través de la Agencia Informativa Católica Argentina (AICA) se informó a fines de 2013 que monseñor Arancibia “ha hecho una visita fraterna a la Arquidiócesis de Rosario con la finalidad de recoger informaciones sobre su actual situación pastoral".
También señaló que "el resultado de la visita será transmitido a la Santa Sede y, por lo tanto, todos han de abstenerse de sacar conclusiones y de emitir juicios anticipados, que serían imprudentes e injustos".
La declaración oficial se produjo luego que la agencia DyN reveló que la Arquidiócesis de Rosario estaba "intervenida" por orden del Vaticano. Mollaghan rechazó esa versión pero admitió la gestión de Arancibia, encargada por el Papa, ante las “quejas de algunas personas”.
Mollaghan llegó al arzobispado de Rosario en 2005 y tomó posesión de su cargo el 18 de marzo de 2006. Nacido el 2 de mayo de 1946 había sido consagrado obispo auxiliar porteño en 1993 por el cardenal Antonio Quarracino. En el 2000 fue obispo de San Miguel, en el Gran Buenos Aires, y en 2005 sucedió a Eduardo Mirásl en Rosario.
Señaló la agencia AICA que “el nombramiento de monseñor Mollaghan en el más importante de los dicasterios de la Curia Romana se ubica en el marco de los cambios que se propone realizar el papa Francisco.
Su solvencia en el campo del Derecho Canónico era conocida y muy apreciada durante los siete años que trabajó en la curia porteña junto con el actual pontífice. La importante y delicada tarea a la que es convocado a ejercer ahora al servicio de la Iglesia universal, en parte ya la está ejerciendo con algunos casos cuyo estudio le fue confiado recientemente”.
Y agregó el organismo oficial católico que “su eficiencia fue valorada por los obispos en diversas ocasiones que lo llevaron a cumplir cargos de gran responsabilidad: fue secretario general de la Conferencia Episcopal Argentina durante dos períodos; secretario de la comisión episcopal para la Universidad Católica Argentina Santa María de los Buenos Aires (UCA); miembro de la comisión episcopal para el Ordenamiento territorial; presidente del Consejo Jurídico de la Conferencia Episcopal Argentina; y delegado ante el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM)”. (Jackemate.com)