Por Jorge Ferrari
¿Dónde está? ¿Le habrá pasado algo? ¿Por qué no corre con aquella regularidad de otrora? Fueron algunas de las muchas preguntas que me hizo un amigo por el histórico Tranvía 277 de la línea 15 de la Asociación Rosarina de Amigos del Riel (ARAR). Y fue el disparador para comenzar una breve investigación por distintos sitios de la ciudad.
La última vez que corrió, según me dijeron, por su breve circuito por la avenida Wheelwright entre Balcarce y Presidente Roca, sus dos cabeceras, fue el pasado 9 de octubre, un domingo coincidente con los festejos de la Virgen del Rosario, que es la patrona de la ciudad.
Entonces mi amigo, que no es de la ciudad, pero la quiere como si hubiera nacido en ella, empezó a elaborar posibles hipótesis que hicieron o han hecho hasta este presente que no volviese a correr por ese breve circuito que, quizás alguna vez por obra de quien sabe, se extienda al sudeste hasta la entrada de la emblemática estación Rosario Central, y al noroeste hasta su par de Rosario Norte, en el corazón del barrio de Pichincha.
Y hay aparecieron cientos de respuestas a una ausencia que se siente entre quienes amamos los rieles y no creemos que sus tendidos representan heridas profundas y dolientes para una ciudad, sino que son verdaderos medios masivos de traslado de sus habitantes, cuidando el ambiente y quitando de las calles los automóviles particulares.
¿Habrá sido esta ola de calor que nos acompañó desde temprano este verano pasado recientemente? ¿algún hecho o episodio de violencia que pudiera surgir por su presencia en la calle lo que hizo que los directivos de la ARAR no presentasen iniciativa para correrlo?
“No sé verdaderamente la razón de la ausencia del 277”, sólo atiné a decirle a mi amigo, quien me miraba asombrado porque me decía “en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires hay un recorrido histórico y es muy promocionado desde el mismo gobierno porteño. ¿Por qué acá no hay igual actitud frente al uso del tranvía como una alternativa turística más que ofrece Rosario?”
Y, sin dejarme respirar, me preguntó por qué razón no quieren prolongar o agrandar su recorrido desde Rosario Norte a Rosario Central y viceversa, cuando hay vías y, además, un hermoso recorrido por parques y ferias.
“Bueno, tengo entendido que sobre la prolongación del recorrido del tranvía habría hecho desde que asumió Pablo Javkin la jefatura municipal de Rosario una gestión la ARAR justamente para agrandar su recorrido, al menos hasta Corrientes en una primera instancia”, le respondí.
Y para mejorar mi respuesta le dije: “Hasta se presentaron, entiendo, carpetas al respecto a funcionarios de la Secretaría de la Movilidad, ante la Secretaría de Turismo y hasta en el mismo riñón del intendente lo saben.”
Las reuniones fueron mucho más, según supe horas después, porque habría habido encuentros de funcionarios responsables de Semáforos de la Municipalidad para rehabilitar el cruce de Dorrego y la unión de las avenidas de Wheelwright y de la Costa que viene desde Puerto Norte.
Pero, todo hace pensar, al menos, que no habría interés del municipio en que este tranvía tan querido por los rosarinos, y mucho más por los niños y adolescentes que disfrutaron de un viaje, de hacer lo necesario para que vuelva a circular por su breve circuito.
Dejo una sugerencia o pregunta en el aire: ¿Habrá en la Municipalidad algún funcionario que haga de interlocutor con la gente de la ARAR para que el histórico tranvía 277 de la línea 15 vuelva lo más pronto posible a circular los fines de semana? Y voy por más: Qué bueno sería prolongar su recorrido, al menos, en una primera instancia hasta calle Corrientes. Ojalá que se haga justicia con esta injusticia. (Jackemate.com)
(*) Licenciado en Periodismo – Director de Jackemate.com